Llegó un poco asustado y se mostraba tímido, pero solo fue pasajero porque, pasados unos días, Chocolate se nos acercaba con cariño y hasta con alegría y ahora es un perrillo sociable que busca nuestras caricias. Se lleva bien con todos los perrillos, con los que juega todos los días en el recreo, y comparte chenil con dos compañeros. Pendiente de castración y test de gato. Es negativo e leishmania, ehrlichia y filaria.

HISTORIA: Llegué al Hogar de Asís junto a una chica joven que me recogió en un paraje de Sierra Morena. Estaba solo y me fui hacia ella en cuanto la vi, ya no me separé y llegamos hasta aquí. No traje chip identificativo y nadie ha preguntado por mí. Ya soy un perrillo del Hogar de Asís que espera encontrar el calor de una familia que nunca quiera separarse de mí